Si dispones de plantitas con tierra, es posible que te preguntes de qué formas más o menos ecológicas y rentables podrías cultivarlas. Pues, en esta entrada, vamos a leer sobre los sistemas de riego hidropónico para plantas con sustrato y otras técnicas de riego que puedes utilizar a la hora de nutrir y cultivar las plantas que viven en suelo. Sin embargo, también hay sistemas hidropónicos destinados a las plantas sin suelo, es decir, que viven en agua y en aire (sin tierra). Espero que te encante la información y que no dudes en buscar otros temas de interés.
Sistemas hidropónicos para plantas con sustrato
Los sistemas hidropónicos son un conjunto de técnicas y métodos de cultivo de plantas que utilizan agua y nutrientes en lugar de tierra para el crecimiento y desarrollo de las raíces. En estos sistemas, las plantas se cultivan en un medio de cultivo inerte, como perlita, vermiculita, fibra de coco, lana de roca, entre otros, y se les suministra una solución nutritiva que contiene los nutrientes necesarios para su crecimiento.
Sistema hidropónico de riego por goteo
Este sistema utiliza tuberías con pequeños agujeros llamados goteros para liberar el agua y los nutrientes directamente en la base de la planta.
Entonces, el agua y los nutrientes se suministran gradualmente a través de los goteros, lo que permite una absorción más eficiente por parte de las raíces de la planta y evita el desperdicio de agua. Además, el sistema de riego por goteo permite una mayor precisión en la aplicación de agua y nutrientes, lo que puede resultar en un mayor crecimiento y rendimiento de las plantas.
Sistema hidropónico de Mecha
El sistema hidropónico de mecha, también conocido como sistema de mecha o sistema pasivo, es un método de cultivo hidropónico en el que las plantas se cultivan en un medio de cultivo inerte, como vermiculita, perlita o fibra de coco, y se les suministra agua y nutrientes a través de una mecha o cordón que conecta el medio de cultivo con un recipiente de agua y nutrientes.
La mecha actúa como una especie de «pabilo» que absorbe el agua y los nutrientes del recipiente y los lleva al medio de cultivo, donde las raíces de las plantas pueden absorberlos. Este sistema es muy sencillo y económico, y es ideal para cultivadores principiantes o para aquellos que desean cultivar plantas en pequeñas cantidades.
Este sistema es muy eficiente en el uso del agua y los nutrientes, ya que la mecha solo absorbe la cantidad de agua y nutrientes que la planta necesita en cada momento, evitando así el desperdicio de agua y nutrientes. Además, el medio de cultivo inerte utilizado en este sistema es muy liviano y fácil de manipular, lo que permite una mayor flexibilidad en el cultivo y trasplante de las plantas.
Sistema hidropónico de Flujo y reflujo
El sistema hidropónico de flujo y reflujo, también conocido como sistema de inundación y drenaje, es un método de cultivo hidropónico en el que las plantas se cultivan en un medio de cultivo inerte, como perlita, vermiculita o fibra de coco, y se les suministra agua y nutrientes a través de ciclos de inundación y drenaje.
En este sistema, las plantas se colocan en bandejas o contenedores que se encuentran sobre una mesa o estructura elevada. La mesa tiene conectado un sistema de tuberías y una bomba que permite inundar el medio de cultivo con agua y nutrientes durante un tiempo determinado, y luego drenar el exceso de agua de vuelta al tanque de nutrientes.
Este sistema permite que las plantas absorban los nutrientes y el agua durante el ciclo de inundación, y luego permite que las raíces respiren y se oxigenen durante el ciclo de drenaje. El ciclo de inundación y drenaje se puede programar para satisfacer las necesidades específicas de cada tipo de planta y se puede ajustar para controlar la frecuencia y duración de cada ciclo.
Este sistema, al igual que el de mecha, es muy eficiente en el uso del agua y los nutrientes, ya que evita el desperdicio de agua y nutrientes al permitir que las plantas absorban solo lo que necesitan en cada momento. Además, el medio de cultivo inerte utilizado en este sistema es muy liviano y fácil de manipular, lo que permite una mayor flexibilidad en el cultivo y trasplante de las plantas.
Otros sistemas de riego para las plantas en tierra
Dentro de estos sistemas de riego, destacan, principalmente, tres:
Sistema de riego por aspersión
El sistema de riego por aspersión es un método de riego en el que el agua se distribuye a través de un sistema de tuberías y aspersores que rocían el agua en forma de lluvia sobre la superficie del suelo o cultivo. Este sistema es ideal para el riego de grandes áreas y se puede ajustar para satisfacer las necesidades de diferentes tipos de plantas.
Sistema de riego por inundación
El sistema de riego por inundación es un método de riego en el que se aplica agua directamente sobre el suelo o cultivo, permitiendo que se absorba por capilaridad. Este sistema es comúnmente utilizado en cultivos de arroz y también puede ser utilizado en huertos y jardines.
Éste es uno de los sistemas de riego hidropónico para plantas con sustrato menos ecológicos de todos, pero ¡sigamos!
Sistema de riego por subirrigación
El sistema de riego por subirrigación es un método de riego en el que el agua se suministra directamente a través del suelo o sustrato, lo que permite que las plantas absorban el agua y los nutrientes desde abajo. Este sistema es comúnmente utilizado en cultivos hidropónicos y en la agricultura de invernadero, ya que permite una mayor eficiencia en el uso del agua y un mayor control sobre la cantidad de agua y nutrientes que reciben las plantas.
Conclusión: ¿cuál es el mejor sistema de riego para plantas con sustrato?
El sistema de riego por goteo es el más utilizado debido a su eficiencia y precisión en la aplicación de agua y nutrientes. Esto no quiere decir que sea mejor o peor que ningún otro porque, de hecho, no se puede determinar cuál es el mejor sistema de riego hidropónico. Todo depende de las necesidades y características de cada cultivo en particular. Cada sistema tiene sus ventajas e inconvenientes y se deben evaluar en función de factores como el tipo de planta, el clima y la disponibilidad de agua y nutrientes. Es importante analizar las ventajas e inconvenientes de cada sistema para seleccionar el que mejor se adapte a las necesidades de nuestro cultivo y obtener los mejores resultados.